Salamanca

Ubicada el comarca del Campo de Salamanca, en plena meseta Norte, Salamanca es la sede de la diócesis salmantina. Con una población de cerca de 150.000 habitantes, los orígenes de la urbe se remontan a hace unos 2.700 años.

La ciudad alberga la universidad en activo más antigua de España, la Universidad de Salamanca, creada en el año 1218 por Alfonso IX de León. Fue además la primera de Europa que ostentó el título de Universidad por real cédula de Alfonso X el Sabio en el año 1252 y por la licentia ubique docendi del papa Alejandro IV en 1255.

Salamanca está ligada a la historia universal gracias a nombres propios como Antonio de Nebrija, Cristóbal Colón, Fernando de Rojas, Fray Luis de León o Miguel de Unamuno.

Salamanca Patrimonio de la Humanidad

En el año 1988 el casco antiguo de la ciudad fue nombrado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Cuenta con un importante patrimonio histórico-arquitectónico, entre el que destacan sus dos catedrales, la Casa de las Conchas, la Plaza Mayor, el Convento de San Esteban y las Escuelas Mayores. Desde el año 2003 su Semana Santa es considerada Interés Turístico Internacional.

En el año 2002 se la nombró Capital Europea de la Cultura por el Consejo y el Parlamento Europeo. En el año 2005 tuvo lugar en ella la celebración de la XV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno y también desde ese año se celebra cada año allí el Festival Internacional de las Artes de Castilla y León.

En Salamanca se encuentran además importantes instituciones científicas y centros de investigación como son el Centro de Investigación del Cáncer, el Instituto de Neurociencias de Castilla y León o el Centro de Láseres Pulsados Ultracortos Ultraintensos.

Actualmente es considerada el gran referente mundial de la enseñanza del castellano al concentrar el 78% de la oferta existente en Castilla y León, un 16% del mercado nacional.

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La historia de Salamanca comenzó hace aproximadamente 2.700 años y tuvo su origen en una aldea asentada en el cerro de San Vicente, sobre el río Tormes. Desde entonces, la ciudad ha sido testigo del paso de vacceos, romanos, visigodos o musulmanes. La repoblación medieval la llevó a cabo Raimundo de Borgoña, yerno del rey Alfonso VI.

En el año 220 a.C. los casi cinco mil habitantes de la Salmantina prerromana asistieron al asalto protagonizado por el general cartaginés Aníbal Barca, acompañado por un escuadrón de 40 elefantes. A partir del año I a.C. los romanos convirtieron la ciudad en una poblada “civitas” y un estratégico enclave dentro del trazado de la Vía de la Plata. Con el objetivo de facilitar el paso de esta calzada, que comunicaba Mérida con Astorga, los ingenieros romanos construyeron un largo puente que hoy todavía se conserva. La ciudad, que en aquel entonces pertenecía a la Lusitania, alcanzó entonces la categoría de municipio.

El siglo V vino acompañado por la crisis romana y las sucesivas invasiones de los pueblos germánicos, lo que significó para Salamanca el inicio de más de 700 años de decadencia. Con la llegada de los musulmanes la crisis se agravó aún más debido a que la ciudad estaba sometida a continuas incursiones por parte de ambos contendientes.
Los cristianos del norte fracasaron intentando repoblar la zona y los islamitas del sur tan sólo hicieron unas pocas incursiones encabezadas por el caudillo cordobés Almanzor.

A finales del siglo XI, el conde francés Raimundo de Borgoña repobló Salamanca con francos y gallegos, los distintos grupos de pobladores se distribuyeron alrededor de cuarenta colaciones con sus correspondientes iglesias. Se restauró la sede episcopal en el año 1102, comenzó a levantarse la catedral románica y se reconstruyó la antigua muralla celtibérica y romana. En el siglo XIII la ciudad vio ampliar su perímetro amurallado y en el año 1218 se fundaron los Estudios Generales, embrión de la futura Universidad.

Tras la crisis europea del siglo XIV y un conflictivo siglo XV marcado por los enfrentamientos feudales Salamanca entra en el siglo XVI decidida a convertirse en la ciudad renacentista más importante de la península Ibérica. La prosperidad social y económica que les dio el comercio, junto con las rentas latifundistas y la actividad lanera lograron que su población aumentara hasta los 25.000 habitantes.

La Universidad alcanzó en esa época uno de sus mayores esplendores al convertir a Salamanca en centro de irradiación cultural, algo que atraía a su vez a miles de estudiantes de todas partes y a numerosas órdenes religiosas, que buscaban el amparo intelectual y humanista de esta prestigiosa institución docente. Se erigieron en aquella época una gran cantidad de palacios, casonas, conventos y colegios en los que el estilo predominante era el Plateresco.
Su época dorada se alargó hasta mediados del siglo XVII, Siglo de Oro de las letras españolas en el que brillaron con luz propia escritores como Miguel de Cervantes, San Juan de la Cruz, Teresa de Jesús, Luis de Góngora, Francisco de Quevedo, Calderón de la Barca o Lope de Vega.

El estallido social, económico y cultural poco a poco se fue diluyendo coincidiendo con otra crisis general que provocó un fuerte descenso demográfico. Aún así, en aquella época se construyeron edificios barrocos como la Clerecía o la Plaza Mayor, elementos que aún hoy marcan el perfil urbano de la ciudad.

EL impacto negativo de la Guerra de la Independencia sólo mejoró con la llegada del ferrocarril pero la Guerra Civil empezó y significó un nuevo paréntesis en el que Salamanca se convirtió en breve sede del cuartel general de las tropas franquistas. Tras el conflicto y una larga posguerra, la Universidad volvió a convertirse en catalizador de la vida ciudadana. Con la democracia se obtuvo prosperidad económica y vertebración social, transformando la ciudad en un auténtico emporio universitario, cultura y turístico. Su punto álgido en el siglo XX llegó con el reconocimiento internacional por parte de la Unesco.

La Universidad de Salamanca es la más antigua de España y una de las cuatro más antiguas de Europa junto con Bolonia, Oxford y París. Su origen está en las escuelas catedralicias de época medieval, en torno al año 1130 y ya en el siglo XVII era considerada la universidad más prestigiosa.

El Estudio General, germen de la Universidad, fue instituido en el año 1218 y era entonces el segundo más antiguo de España, tras el Estudio General de Palencia. Se trata además de la primera institución educativa europea que obtuvo el título de Universidad gracias a una bula de Alejandro IV en el año 1255.

Los edificios históricos de la Universidad de Salamanca se construyeron en el siglo XV y son el Edificio de Escuelas Mayores, el Edificio de Escuelas Menores y el Hospital del Estudio. Los tres edificios se encuentran en la plaza del Patio de las Escuelas, en pleno centro de Salamanca.

Escuelas Mayores El Edificio de Escuelas Mayores es el más emblemático de todos. Comenzó a construirse en el año 1411 y su fachada, elemento más conocido, está dividida en tres cuerpos. Destaca el medallón de los Reyes Católicos, el escudo de Carlos V y una capilla dedicada al Papa Benedicto XIII. Escuelas Menores El Edificio de Escuelas Menores es el que se usaba como lugar de docencia para obtener el título de bachiller y actualmente alberga distintas dependencias de la Universidad.

El Hospital del Estudio construido en el año 1413, se utilizaba como hospedería, es decir, para proporcionar alojamiento a los estudiantes con escasos recursos económicos. En estos momentos es la sede del rectorado de la Universidad de Salamanca.

La rana de Salamanca es un detalle ornamental labrado en la portada del edificio que con el tiempo ha ido cobrando importancia, tanta que se ha convertido en un icono de la ciudad. Se trata de una representación de una pequeña rana sobre una calavera. Sobre la suerte que corre el primero que la ve hay numerosas leyendas.

Es un espacio urbano construido como plaza mayor que poco a poco se ha ido convirtiendo en el centro de la vida social de la ciudad. Construida en estilo barroco entre los años 1729 y 1756, el diseño es del arquitecto Alberto Churriguera aunque posteriormente fue continuada por otros.

A comienzos del siglo XIX sufrió varias remodelaciones urbanísticas pero la más importante se dio en el siglo XX, cuando fue desprovista de sus jardines, quiosco de música central y urinarios públicos con el objetivo de que quedara diáfana.

Nació de manera natural al lado de una campaña en la que se comerciaba, en la antigua Puerta del Sol. Debido a que se encontraba allí la Iglesia de San Martín hasta el siglo XV se la conoció como Plaza de San Martín. La plaza, mucho más grande que la Plaza Mayor, incluso cuatro veces más, comprendía entonces la plaza del mercado, la del Corrillo y la del Poeta Iglesias, siendo considerada “la Plaza más grande de la cristiandad”.

La idea de la construcción viene del corregidor andaluz Rodrigo Caballero, que convenció al Ayuntamiento de la necesidad de tener una plaza más armónica y acorde con las corrientes urbanísticas de la época. La plaza se construye al estilo de la Plaza Mayor de Madrid y se traslada allí finalmente el Ayuntamiento, lo que le da el rango de Plaza Mayor.

Cabe destacar que por aquel entonces la Plaza Mayor de Madrid era distinta, tenía dos plantas más y no estaba cerrada completamente pero tras sufrir un incendio en el año 1790 Juan de Villanueva la reconstruye y la remodela suprimiendo los dos pisos y cerrando las esquinas con arcos para la entrada de las calles, al estilo de la de Salamanca.

Actualmente la Plaza Mayor de Salamanca es el centro de la vida de la ciudad, un punto de encuentro habitual de sus habitantes. En ella hay numerosos bares y terrazas, y también la cafetería más antigua de la ciudad, el centenario Café literario Novelty, punto de encuentro habitual de literatos y artistas de la ciudad desde que se inauguró en el año 1905.

Con motivo del 250 aniversario de la Plaza Mayor de Salamanca se diseñó el programa cultural “Salamanca 2005. Plaza Mayor de Europa”, en el que se ofrecieron actividades musicales y escénicas destinadas a todos los públicos.

Construida a finales del siglo XV con un estilo gótico civil, su fachada está decorada con más de 350 conchas de vieira, distintivo de la Orden de Santiago. La originalidad de la Casa de las Conchas no está sólo en el motivo elegido, también en la disposición de las mismas, que se hace siguiendo la tradición mudéjar de decoración en rombo. Actualmente el edificio alberga una biblioteca pública.

Se trata de un jardín de 2.500 metros cuadrados ubicado en pleno casco antiguo de Salamanca que ofrece unas hermosas vistas de las Catedrales y de la ribera del Tormes. Es llamado así por tratarse del escenario elegido por el famoso escritor Fernando de Rojas para recrear su novela, “La celestina”, publicada en el año 1502.

El jardín se encuentra situado en la ladera de la antigua muralla salmantina, a los pies del río Tormes. A día de hoy es un parque abierto al público y considerado de carácter romántico por la historia de amor que viven los personajes de la obra de Rojas. Se inauguró en el año 1981.